PARQUE NEVADO
Comienzo con la paciencia
⠀⠀⠀⠀⠀⠀ que me concede el corazón de un pájaro
Desde ayer late en mí un escudo para el tiempo
Entonces,
la muerte es nuestro gran espejo
Acerca su manto a contraluz
⠀⠀⠀⠀⠀⠀y cuando llega la videncia
⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀⠀ nos quedamos dentro
Damos pasos largos
⠀⠀⠀⠀⠀⠀entre cintura y espasmo
En el deslizar de la cascada
⠀⠀⠀⠀⠀⠀el agua corre por las venas
Abrazo de las piedras
donde no hay espacio para las fisuras del invento
El bosque es el único encanto:
sigilo y guardián de los silencios.
Recogimos el temblor en nuestros cuerpos
Como talismán
⠀⠀⠀tomé el cristal de las batallas.
ACORDES PARA LUCIÉRNAGA
Pequeña centinela
⠀atrapada en el tropiezo
Rendida a los pies del bosque
⠀ renace la noche en amarillo
Vendrá el día
⠀⠀⠀para buscarle
⠀⠀⠀⠀⠀⠀escondite al movimiento
HISTORIA DE AÑO NUEVO
También llueve aquí en abril.
A los cuentos completos de Onetti
⠀⠀⠀⠀le agregaron ocho páginas en blanco.
Se cortaron las historias
mi tiempo no es tu tiempo
a la hora que tú duermes,
yo vigilo tu sueño de pez
⠀⠀⠀⠀ que nada entre corales.
El agua se mueve,
alguien se aleja,
se acerca,
escapa de la red.
MEMORIA DE APRENDIZ
No basta con acariciar palabras,
⠀⠀⠀ lo definitivo es dibujar la noche.
Seguir la línea de su curva,
hacia el eco común
⠀⠀⠀⠀ o la profunda luz.
Tomar la imagen de su pulso.
Medir la turbulencia.
Oír su tono,
el latido de su adentro.
Habitar las estrellas que la viven.
Desnudar falsos colores
y mostrar el plateado vuelo
de pájaros fantasmas.
No basta con acariciar palabras,
lo definitivo es asistir a los cortejos
con toda irreverencia.
Grabar los rostros,
vestir sus cuerpos.
Memoria de aprendiz,
la inteligencia es un juego de distancia.
Un dolor agudo.
Una irónica y sutil virtud.
VIGÍA
Adentro del corazón suena la campana.
Alguien que no duerme,
habita el cuerpo de la casa.
Después de agotar los intentos,
el intruso sale a caminar,
invade el terreno de su piel.
No hay una frase para describir la salida,
el paso largo hasta el extremo.
Un ligero ruido,
preciso desborde de la calma
Al silencio, agregó la palabra.
Esclavo de la víspera,
sentado en un cuarto sin luz
regresa al fondo.
Al espacio que es, no se le abandona.
Ayer, le pertenecía al diferente.
Así vive, compañero de él mismo
Alquilado por dos.
El que fue,
ya no vuelve,
es fantasma.
El inmortal es el reflejo de los otros
en su rostro.
YIRAMA CASTAÑO GÜIZA (1964) es una periodista, editora y poeta colombiana, nacida en Socorro, Santander. Participó en la creación de la Revista y de la Fundación Común Presencia. Hace parte del Comité Asesor del Encuentro Internacional de Mujeres Poetas de Cereté, Córdoba. Sus poemas han sido traducidos y publicados en medios de Colombia y el exterior. Ha participado en los más importantes Festivales de Poesía en Colombia y en Encuentros de escritores a nivel internacional. Libros de poesía publicados: –Corps avant l´ oubli, Cuerpos antes del olvido (Yirama Castaño, Stéphane Chaumet y Aleyda Quevedo), Ediciones de la Línea Imaginaria, Ecuador, 2016. -Poemas de amor (Yirama Castaño, Josefa Parra), Ediciones Corazón de Mango, 2016. -Malabar en el abismo, Antología, Común Presencia Editores, Colección los Conjurados, 2012. -Memoria de aprendiz, Común Presencia Editores, Colección Los Conjurados, 2011. -El sueño de la otra, Colección Prometeo Serie Hipnos,1997. Jardín de sombras, 1994. Naufragio de luna, 1990.
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